No puedo más. Ya intenté hacer mi vida sin vos y no resulta. Intenté reemplazarte y tampoco me siento cómoda. Quise quedarme sin tu presencia ni tu recuerdo y no logro barrerte definitivamente porque te instalás en mis necesidades con tu ironía, burlándote de mi y aparentando indiferencia.
No sos indispensable, pero con vos la vida no tiene sobresaltos. Las líneas divisorias permanecen claras, los límites existen y yo siento que el equilibrio me funciona. Si no estás, por el contrario, todo se vuelve difuso, los bordes se salen, se desdibujan, coquetean y se desparraman buscando adherirse a cualquier otro borde, confundiendo.
No tengo certezas, vos me las das todas.
No puedo caminar confiada, sin vos, porque aparece una grada de repente y me tropiezo. Cuando vos estás solo quedan los accidentes, de los que no me escapo pero resultan más bien ocasionales y siempre puedo echarle la culpa a la casualidad. Pero cuando estás todo queda claro, el contraste se manifiesta y no tengo que forzarme para entender cada línea, cada trazo, cada píxel.
No, no sos indispensable, pero como me hacés de falta siempre, querido par de lentes.
PD: Intenté engañarte con un par de lentes de contacto pero no funcionó. Invaden mi espacio y ese brillo.... Prefiero tu cuerpo cercano pero distante. Nos funciona bien así.
No sos indispensable, pero con vos la vida no tiene sobresaltos. Las líneas divisorias permanecen claras, los límites existen y yo siento que el equilibrio me funciona. Si no estás, por el contrario, todo se vuelve difuso, los bordes se salen, se desdibujan, coquetean y se desparraman buscando adherirse a cualquier otro borde, confundiendo.
No tengo certezas, vos me las das todas.
No puedo caminar confiada, sin vos, porque aparece una grada de repente y me tropiezo. Cuando vos estás solo quedan los accidentes, de los que no me escapo pero resultan más bien ocasionales y siempre puedo echarle la culpa a la casualidad. Pero cuando estás todo queda claro, el contraste se manifiesta y no tengo que forzarme para entender cada línea, cada trazo, cada píxel.
No, no sos indispensable, pero como me hacés de falta siempre, querido par de lentes.

No hay comentarios:
Publicar un comentario