- Ya quiero mi tatuaje, dije.
- Hagámonos tres, respondieron mis planes.
- No hay plata, dijo mi cuenta
- Abrí la alcancía, interrumpió mi subconsciente.
-¿Cuál alcancía? alcancé a pronunciar.
- Faltamos nosotros, recalcaron mis pendientes.
- ¿Y eso qué?, es para vos, susurró la vanidad.
- Nuay, dijo enérgico mi bolsillo
Y el muy hijueputa manda.
- Hagámonos tres, respondieron mis planes.
- No hay plata, dijo mi cuenta
- Abrí la alcancía, interrumpió mi subconsciente.
-¿Cuál alcancía? alcancé a pronunciar.
- Faltamos nosotros, recalcaron mis pendientes.
- ¿Y eso qué?, es para vos, susurró la vanidad.
- Nuay, dijo enérgico mi bolsillo
Y el muy hijueputa manda.